Raúl Urrutia y Jorge Abbott se conocen hace años. Ambos oriundos de Viña del Mar. Por eso Urrutia, constitucionalista, ex diputado de RN, ex presidente del Consejo para la Transparencia y actual director de Chile Transparente, defiende al fiscal nacional electo. Pero, al igual que otros expertos en transparencia, cree que debieran declararse por la Ley de Lobby las reuniones que hubo entre senadores y aspirantes a la jefatura del Ministerio Público. “Las reuniones deben transparentarse. Si bien la reunión que tuvo el nuevo fiscal nacional con el senador Girardi es propia de un proceso de designación, indudablemente eso debe quedar transparentado en algún tipo de instrumento”.
–¿Por qué transparentar? Alguien puede creer que traerá más problemas.
–Porque eso impide que se produzcan situaciones, como las que se están produciendo. Queda en entredicho la reunión. Si nos vamos a la Ley del Lobby, debería dejarse constancia de las reuniones de los parlamentarios, ya sea en sus casas. Se evitan interpretaciones erróneas.
–Jorge Abbott se enojó por esta polémica. Dijo que eso estaba generando un mando de dudas.
–No creo que Jorge se enoje por eso. No hay ataques personales acá. Él sabe que la actuación del Ministerio Público tiene que ser pública. Salvo aquellos casos donde la ley faculte tener reserva. La regla general hoy es la transparencia.
–Cuando fue elegido Sabas Chahuán esto no era tema. ¿Abbot tendrá que asumir con un estándar distinto?
–Gracias a la Ley de Transparencia, el país ha cambiado considerablemente y quiere que sus autoridades actúen a la luz del sol. Ha ido cambiando la mentalidad de los chilenos. Hoy no se pueden hacer actos o entrevistas que no se sepa cuál va a ser el tema de la reunión.
— El presidente de la Suprema, Sergio Muñoz, dijo que le preocupaba que se realizaran estas reuniones.
–Por eso sería bueno que todos los senadores transparenten sus reuniones con los candidatos.
–José Miguel Insulza, presidente de Chile Transparente, donde Ud. Es parte del directorio, planteó que se ha llegado a un extremo que no se puede conversar con nadie. ¿Coincide con él?
–El problema depende de las reuniones que se hagan, es obvio que puede causar inquietud que una persona que está postulando a un cargo se reúna con un senador. Pero es normal que se produzcan estas reuniones, porque un parlamentario quiere saber cuáles son los temas que va a abordar esa persona en el cargo. Lo ideal es que estas reuniones se hagan en dependencias del Senado.
–¿Pero Ud. Discrepa de Insulza, que se está exagerando con este debate?
–Es bueno que en estas situaciones se transparenten. Se han creado suspicacias. No es bueno para el nuevo fiscal.
–¿Comparte la opinión de Insulza?
–En esta materia no la comparto. Debió haberse transparentado más.