Diecisiete personas, entre ellas 13 detectives, dos asistentes policiales y dos administrativos, integran la nueva Brigada Investigadora de Delitos Funcionarios, Bridef, de la Policía de Investigaciones (PDI), que será puesta oficialmente en marcha hoy, luego de una marcha blanca de cuatro meses.
El director general de la PDI, Héctor Espinosa Valenzuela, informó que la unidad se encargará de indagar los crímenes y simples delitos cometidos por empleados públicos en el desempeño de sus cargos.
Entre otras indagatorias, ya está trabajando con el ministro en visita Omar Astudillo, quien sustancia el caso del fraude en el Ejército, y también las aristas de SQM vinculada con el presunto cohecho a funcionarios públicos.
«Chile cayó dos puestos en el ranking de percepción de corrupción que elabora Transparencia Internacional y es una señal que nos debe llamar la atención a todos», dijo Espinosa. Agregó que la policía «no claudicará en defender su máxima que es investigar para los ciudadanos y no contra ellos, independientemente de los costos que nos pueda traer».
Manifestó que cuando Chile ingresó a la OCDE le fue requerido contar con una ley que actuara sobre las personas jurídicas y con la creación de una unidad especial que persiguiera delitos de corrupción.
Señaló que los oficiales que integran la nueva unidad «han probado ser buenos investigadores, con experiencia en casos emblemáticos, con títulos profesionales que avalan su experiencia y con una hoja de vida intachable».
En los delitos de corrupción, informó, la PDI aporta cerca del 90% de los informes periciales e indagaciones que elabora por delegación del Ministerio Público, en delitos como fraude al fisco, cohecho, soborno, malversación de caudales públicos, negociación incompatible y tráfico de influencia entre otras.
Al mando del subprefecto Pietro Hernández, la unidad funcionará en dependencias de la PDI en calle Williams Rebolledo, en Ñuñoa, y será puesta oficialmente en marcha con una ceremonia a la que asistirán, entre otros, el fiscal nacional Jorge Abbott.